Crumble de manzana

Una receta fácil de hacer, muy rica y perfecta para cualquier momento. ¿Se puede pedir más? Es la definición del crumble de manzana que te traigo en esta receta. Una receta sin gluten (si utilizas avena sin gluten), sin lácteos y sin huevo. El único alérgeno presente son los frutos secos que perfectamente puedes eliminar.

Estoy convencida de que una vez que pruebes este crumble, no vas a poder prepararlo una sola vez, si no que se convertirá en un básico para tu día a día.

Además, si no te gustan las manzanas, con pera queda una receta genial. O con pera y plátano, ya que el plátano da un extra de dulzor muy muy rico!

¿Comenzamos?

Aquí te dejo los ingredientes:

Dos tazas de copos de avena
Una taza y media de harina de avena
Media taza de xilytol
Dos cucharaditas de canela
Una pizca de sal.
Un puñado de frutos secos
Tres cucharadas de aceite de coco derretido
el jugo de medio limón
Cuatro manzanas golden

Comenzamos cortando en cubos las manzanas, disponiendolas en la base del molde.

Rociamos los dados de manzana con el jugo de limón para evitar que se oxiden.

En un cuenco, mezclamos todos los ingredientes secos: la harina, los copos, el xilytol, la canela y los frutos secos.

Ahora que ya llega el calor, probablemente el aceite de coco puede que esté derretido, pero si no es así, mete unos segundos el aceite de coco en el micro para que esté completamente líquido y lo agregamos a la mezcla.

Mezcla todo bien y disponlo encima de la manzana.

Hornea a 180º durante 40 minutos.